Eficiencia en Movimiento: Cómo Reducir el Consumo de Combustible en Unidades de Refrigeración
En el transporte refrigerado, cada litro de combustible cuenta. El consumo de diésel en una unidad de refrigeración no solo impacta en los costos operativos, sino también en la huella ambiental de tu empresa. Mantener un buen control sobre el gasto energético es clave para lograr eficiencia sin poner en riesgo la cadena de frío.
- 1. Mantén el equipo en buen estado
- Filtros limpios, niveles correctos de refrigerante y componentes en buen estado ayudan a que el equipo trabaje sin esfuerzo extra. Una unidad descuidada consume más combustible y puede sufrir averías inesperadas.
- 2. Ajusta la temperatura a la carga
- Configurar temperaturas más bajas de lo necesario obliga al equipo a trabajar más tiempo y gastar más diésel. Respeta el rango recomendado para cada tipo de producto.
- 3. Evita aperturas innecesarias
- Cada vez que se abre la puerta del remolque, el aire frío se escapa y el equipo debe volver a enfriar el espacio. Planificar las descargas y minimizar las aperturas ahorra combustible y mantiene estable la temperatura.
- 4. Utiliza el modo de operación correcto
- Algunos equipos cuentan con modos de trabajo como “ciclo de ahorro” o “economy mode”. Estos reducen las horas de operación del compresor cuando la temperatura está bajo control.
- 5. Capacita a los operadores
- Un operador bien informado sabe cómo cuidar la unidad y reducir gastos. La eficiencia empieza con las personas que están detrás del volante.
Conclusión
Reducir el consumo de combustible en unidades de refrigeración no es solo cuestión de ahorro, es una estrategia para alargar la vida útil del equipo, cuidar el medio ambiente y ofrecer un servicio más competitivo.
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